Edificio Chrysler: Su Difícil Competencia Por Ser El Edificio Más Alto Del Mundo

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El edificio Chrysler es uno de los más bellos de Manhattan. Al atardecer, cuando la ciudad se ilumina toda, la majestuosidad del Chrysler se destaca entre muchos otros tan famosos como él.

Lo mismo sucede cuando lo ves en las imágenes aéreas. Entre ese laberinto de enormes edificios su presencia se hace notar. Es bellísimo.

Su edificación marcó un sitial importante en la era moderna. Abrió sus puertas al público en una década en la que a pesar de las dificultades, nunca se dejó de soñar en grande. Fue inspiración para futuros proyectos de gran envergadura que terminarían adornando y desarrollando aún más a la gran ciudad de Nueva York.

Historia

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La historia del surgimiento de este bello inmueble se enmarca en una época llena de obstáculos. Una situación económica compleja como la de los años 30. Eran los años de la Gran Depresión.

Así y todo, en Nueva York se llevaban a cabo grandes proyectos que fueron transformando la imagen de la ciudad. Había una especie de competencia entre las diversas construcciones que se elevaban a las alturas, entre ellas el Empire State y el edificio Chrysler, dos verdaderos íconos de Nueva York.

Desde el principio se pensó en grande para este proyecto: Su diseño arquitectónico, ubicación, tiempo de construcción. Todo.

Estuvo a cargo de la Corporación Chrysler, inicialmente, luego Walter Percy Chrysler lo adquirió, haciendo del inmueble la sede central de su empresa.

Además de contemplar la altura como uno de los factores más desafiantes, sin duda alguna que al hermoso diseño se le prestó gran atención.

Competencia Por El Edificio Más Alto Del Mundo

Por aquellos días, el estado de Nueva York parecía empeñado en levantar el rascacielos más alto del mundo. Por casi un año -11 meses para ser exactos- el edificio Chrysler lo logró.

La obra inició en 1928 y culminó en 1930.

Los trabajos de construcción se llevaron a un ritmo vertiginoso, cerca de cuatro plantas por semana aproximadamente, hasta completar los 61 pisos  que lo conforman, esto sin contar la llamativa cúspide o corona del techo que lo distingue como uno de los más elegantes y suntuosos. Todo un derroche de lujo y poder.

A diferencia del Empire State, el Chrysler no registró ningún caso de muerte durante la construcción.

Dos años tomó levantar aquella inmensa estructura de cemento, acero y cristal, con sus 319 metros de altura, que lo convirtieron en la edificación más alta de todas.

La posibilidad de alcanzar su propósito récord estuvo a un paso de verse frustrada, pues a pocos días de culminar la obra, otro edificio -el 40 Wall Street- le igualaba en altura. Entonces, bajo un manto de secreto, y como quien saca un «as» de la manga, se construyó la aguja de acero inoxidable que sobresale en lo alto, denominada «El Vértice». Ésta se construyó dentro del edificio. Sorpresivamente el edificio lograba su objetivo, despuntar como el más alto del mundo. Un logro que llamó la atención mundial.

Sin embargo, a la par, también se construía el Empire State, que en 1931, terminada la obra, lo superó en altura. Esto trajo conflictos entre Walter Percy Chrysler, miembro de la Corporación Chrysler y el arquitecto diseñador de la estructura, William Van Alen. La satisfacción por el logro alcanzado, muy pronto se desvaneció. Como resultado, Chrysler se negó a pagar a Van Alen sus honorarios.

Fue inaugurado oficialmente, abriendo sus puertas al público, el 27 de mayo de 1930.

Éste es un edificio destinado sólo para oficinas. No es residencial.

Con los años se le han realizado algunos cambios, renovaciones y mejoras en algunos espacios.

Ha cambiado de dueños. Actualmente el 75% del inmueble pertenece a TMW Real Estate y el 25% a Tishman Speyer Properties.

Diseño 

Diseñado por el arquitecto William Van Alen, éste es uno de los muchos rascacielos que durante los difíciles años de la Depresión Económica se construyó siguiendo la tendencia del diseño arquitectónico Art Déco. Un estilo que se impuso en muchos de los más afamados inmuebles de la ciudad neoyorquina por aquellos años.

Entre otros aspectos, la influencia de la empresa automovilística, Chrysler, se hace notar en algunos detalles propios del edificio, como la torre con sus tapacubos, algo que portaban los autos Chrysler de la época y que además, como diseño arquitectónico, se ajusta a las características propias del estilo Art Déco, entre otros elementos, como los diseños geométricos tan presentes en las ventanas triangulares que se distinguen en lo alto.

En todas las esquinas del piso 61 asoma una gárgola en forma de águila. Las gárgolas, que pueden tener diferentes aspectos, figuran en muchas construcciones de siglos atrás. En este edificio cada diseño y ornamento forma parte de un todo que se mezcla armoniosamente logrando como resultado una obra fabulosa. En el mundo del diseño y la arquitectura una verdadera joya, de la cual presume con orgullo la ciudad de Manhattan.

A diferencia del Empire State, en el edificio Chrysler no está permitido subir para apreciar la ciudad en lo alto. Su gran belleza sólo puede ser admirada desde afuera, algo por lo cual se lamentan muchos turistas enamorados del que, según dicen, es su edificio favorito. Aunque al vestíbulo sí podrás entrar y apreciar los elementos y detalles decorativos que le adornan.

El preferido según los expertos

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El edificio Chrysler no será el más alto de Nueva York, pero figura como uno de los más hermosos de la ciudad. Los viajeros al llegar a Nueva York lo observan llenos de admiración. Fotos van y vienen cual celebridad del cine. De hecho, ha estado presente en más de una película. Y en cuanto a fotografías, éstas son incontables.

En 2005, el Museo de Rascacielos de Nueva York, designó a un grupo numeroso compuesto por ingenieros, arquitectos, historiadores, diseñadores y expertos en general en el mundo de la construcción de edificios, para escoger, según su criterio y experiencia en el ramo, cuáles eran los 10 rascacielos preferidos de Nueva York. El Edificio Chrysler obtuvo el primer lugar.

El Chrysler tiene algo diferente que llama la atención. Tan pronto lo ves en una imagen y ya sabes cuál es. Iluminado es una preciosidad.

Ubicación

Se encuentra en el número 405 de la Avenida Lexington con la Calle 42.

Una gran ventaja a su favor es la cercanía a la Grand Central, lo que permite al turista beneficios múltiples. De allí que además de admirar el Chrysler, también podrás conocer otros edificios y lugares muy famosos en Nueva York. Ya lo he dicho antes, pero lo repetiré siempre, si hay algo fantástico aquí es la ubicación de muchos puntos de interés para visitar, y todos tan cerca uno del otro. Eso lo amarás.

Por último, como ya mencioné arriba, no podrás subir a ningún mirador especial para contemplar la ciudad, de allí que tengas a mano tu cámara fotográfica para que puedas tomarle todas las fotos que gustes desde afuera.

Y a ti ¿cuál rascacielos te gusta más?

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